viernes, 3 de octubre de 2014

NUEVE DÍAS CON LEONARD COHEN: 7. NUNCA IMPORTA

Se perdió la Guerra,
Se firmó el tratado.
No me capturaron.
Crucé la línea,
No me capturaron
Aunque muchos lo intentaron.
Viví entre vosotros
Bien disfrazado.
Tuve que dejar atrás
Toda mi vida.
Excavé algunas tumbas
Que nunca encontrarás.
La historia se cuenta
Con hechos y mentiras.
Tengo un nombre,
Pero eso no tiene importancia

No tiene importancia.
No tiene importancia.
Se perdió la Guerra,
Se firmó el tratado.
Lo que vive es la verdad
Y la verdad es lo que muere.
No sé qué verdad,
Así que no tiene importancia.

Vuestra victoria fue tan completa
Que a algunos de vosotros
Se os ocurrió dejar escrita
Nuestras vidas sin importancia,
Las ropas que nos poníamos,
Nuestras cucharas, nuestros cuchillos,
Los juegos de azar
A los que jugaron nuestros soldados,
Las piedras que cortábamos,
Las canciones que escribíamos,
Nuestra ley de paz
Que da por hecho
Que un marido obedece
Las órdenes de su mujer.
Y todas las expresiones
De la dulce indiferencia que algunos llaman “amor”.
La gran indiferencia
Que algunos llaman Destino.
Pero nosotros teníamos
Formas más íntimas de llamarlo,
Formas tan profundas,
Nombres tan profundos
Que son sangre para mí,
Y polvo para ti.
No hay necesidad
De que esto perdure.
La verdad es lo que vive
Y la verdad es lo que muere

No tiene importancia
No tiene importancia
Se perdió la Guerra
Se firmó el tratado
Lo que vive es la verdad
Y la verdad es lo que muere
No sé cuál de ellas
Así que no tiene importancia

Yo no pude asesinar
De la manera en la que vosotros asesináis.
No fui capaz de odiar,
Lo intenté y fracasé.
Me delataste,
O al menos lo intentaste.
Te alías con aquellos a los que desprecias
Así era tu corazón,
Un enjambre de moscas.
Tu boca fue una vez
Una sarta de mentiras,
No me sorprende,
Eres de su tipo,
Eres de su clase de gente.
Tuve que dejar atrás
Toda mi vida.
Excavé algunas tumbas
Que nunca encontrarás.
La historia se cuenta
Con hechos y mentiras.
Tengo un nombre
Pero eso no tiene importancia.
Tuve que dejar atrás
Toda mi vida.
La historia se cuenta
Con hechos y mentiras.
Sois los dueños del mundo,
Pero eso no tiene importancia.

No tiene importancia,
No tiene importancia
Tuve que dejar atrás
Toda mi vida
La viví al máximo,
La viví a lo grande
A través de capas de tiempo
Que no podéis dividir.

Mi mujer está aquí,
Mis hijos también.
Sus tumbas están a salvo
De fantasmas como vosotros
En lugares profundos
Con raíces enredadas.
Vivo la vida
Que tuve que dejar atrás.

Se perdió la Guerra,
Se firmó el tratado.
No me capturaron,
Crucé la línea.
No me capturaron
Aunque muchos lo intentaron.
Viví entre vosotros
Bien disfrazado

1 comentario:

Juanjo Mestre dijo...

Es alucinante el repaso que te estás cascando sobre lo nuevo de Cohen. Olé. Un abrazo.