Dijiste que eras mi amigo,
¿De verdad amabas la ciudad
O simplemente lo fingías?
Dijiste que amabas sus secretos,
Y las libertades que escondía.
Era mucho mejor que América,
Eso es lo que te escuché decir.
Dijiste: “¿cómo pudo ocurrir?”
Dijiste: “¿Cómo puede ser esto?”
Los que han permanecido, están todos sin honor.
Sobre el puente de la tristeza.
Y nosotros que pedíamos a gritos misericordia
Desde el fondo del agujero:
¿Fue nuestra oración tan jodidamente inútil
Que el Hijo la rechazó?
Así que reúne a los asesinos,
Reúne a todos los de la ciudad,
Déjame que permanezca junto a esos pilares,
Déjame que destruya este templo.
El rey, tan amable y solemne,
Lleva una corona sangrienta.
Así que quédate conmigo junto a esa columna,
Déjame que destruya este templo.
Dijiste: “¿cómo pudo ocurrir?”
Dijiste: “¿Cómo puede ser esto?”
Las cadenas se han ido del cielo,
Las tormentas son salvajes y libres.
Hay otras formas de responder
Que es completamente cierto.
Yo estoy cegado de muerte y odio
Y ese no es lugar para ti.
Hay una mujer en la ventana
Hay una cama en Tinsel Town.
Te escribiré cuando todo esto acabe,
Déjame que destruya este templo.
Dijiste que amabas los secretos de esta ciudad
Y las libertades que escondía.
Era mucho mejor que América,
Era mucho mejor que América,
Eso es lo que te escuché decir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario