martes, 20 de enero de 2015

CHENCHO FERNÁNDEZ: LA NUEVA JOYA DEL ROCK SEVILLANO

El rock en Sevilla es tan escaso como un día de lluvía, pero por momentos, como ésta, puede alcanzar cotas de auténtica maravilla. Rock y Sevilla parecen dos términos antagónicos, contrarios y enfrentados. Es posible que parte de eso tengo que ver con el paisaje desolado de salas cerradas que proliferan en la ciudad. Los grupos de calidad nacen al mismo tiempo que mueren y alcanzan la etiqueta de malditos en un santiamén. Así los Sick Buzos, abanderados del rock indie andaluz (nuestros Velvet sevillanos), hicieron su aterrizaje fugaz a finales de los 90 y...vistos y no vistos. No cesar en el intento da sus frutos y esto lo aplicó sabiamente el lider del desaparecido grupo, Chencho Fernández, y tras su debut (no publicado oficialmente) “Nuevo Debut” y su participación en Las Muñecas de la Calle Feria; nos llega con un magnífico disco, “Dadá Estuvo Aquí”. Los estudios Sputniks, con Jordi Gil, están dando la posibilidad de que todo lo que tiene calidad en Sevilla suene mejor que mejor y esta grabación va a ser la joya de la corona. Los diez temas, subrayados en ocasiones por arreglos de cuerda recuerdan a lo mejor de la historia del rock nacional. Suenan a rock de los ochenta pero con un lenguaje real y moderno tanto en la forma como en el fondo. Las inmensas letras de Chencho son potenciadas por una producción excelente de guitarras y dosis justas de silencios que contienen la rabia, el descontento y el hartazgo de un juventud anciana en fase de hundimiento. Si te enamoras en y de Sevilla, entiendes esos guiños a rincones como Fun Club, Alameda de Hércules, Salvador y, por siempre, la Estación del Prado (inmenso inicio del disco). Y por supuesto; Lou Reed always in my mind.   

martes, 13 de enero de 2015

ROBERT CRUMB: PORTADAS QUE SUENAN POR SI MISMAS

No se ha dado en muchas ocasiones la mano con la música, será porque el silencio distingue al noveno arte, al arte del comic. Y sin embargo mis primeros recuerdos de contacto con una forma de expresión, de emociones y arte, fue el comic, los tebeos, vamos. Y creo que ese es mi puente con otras formas como el cine, la música y, claro, la literatura. Hoy se conocen más los comics por su adaptación al cine que por la lectura de los mismos y me sorprende la marginación a la que se le somete; hay muchas personas que, siendo ávidos lectores de literatura, no han leído jamás un comic. Craso error.
Si en algún apartado ha podido manifestarse el noble arte del comic en la música, ha sido en la ilustración de portadas. Y si me quedo con un grande que se acerca de manera magistral a esto es el gran Robert Crumb. Crumb es el buque insignia del comic alternativo y underground. Un tipo fascinante, huraño y esquivo con la vida, que dio la espalda a la industria y se mantuvo en un plano casi marginal y prácticamente olvidado en los últimos años.
Si no conoces sus obras os recomiendo absolutamente todo lo que ha dibujado y ha escrito; sus dibujos tienen un dinamismo, un volumen y desarrollo lejos de lo vista antes e imitado hasta la saciedad posteriormente. La vida más ordinaria se convierte en tema para sus historietas, y por vulgar y cercano se convierte en algo fascinante. Siempre con una ironía y un pesimismo vital que cobra sus mayores cotas cuando se unió a otro "rarito"; el genial guionista Harvey Pekar, azote del ideal americano.
Su vínculo musical está determinado por los sonidos que le resultan más atractivos; incluso, se dice, que llegó a negarse a hacerle una portada a los Rolling Stones. Es así que llevado por una compulsiva actitud como coleccionista de discos de jazz y blues de principio de siglo, prefiera ilustrar discos de esta tesitura que de aquellos que con los que supuestamente más cercano estaría por su coincidencia en el tiempo y en la moda, es decir rehúso a ilustrar discos de rock o pop en los años 60-70 y se dedicó ha hacerlo sólo de viejas reediciones o combos que revitalizaban sonidos de los años 20-30.
Demos un pequeño repaso a lo más lustroso:




1968 Cheap Thrills. No te cuento más ¿acaso hay alguien que no haya tenido un ejemplar de este disco en las manos? ¿Y acaso no te has pasado horas y horas dándole vueltas a su portada e ilustraciones mientras te pone los pelos de punta los berridos de la Joplin? Pues sí, éstas eran de Robert Crumb y hasta aquí su participación en lo más granado de la realeza del rock/pop. Y porque a él le dio la gana.









1995 Roots of the Grateful Dead The Music Never Stopped. Se prodigó mucho en recopilaciones raras y casi imposible de conseguir hoy en día. Ésta es bastante curiosa y destacable por la presencia de su mismísima deidad, Bob Dylan.






1974 Big John Wrencher and His Maxwell Street Blues Boys Maxwell Street Alley Blue. Sellos raros y artistas casi exclusivos de minorías. Destaco este especialmente, es un disco que descubrí hace unos años y para mí una obra maestra indiscutible del blues de Chicago. El mejor disco de este armonicista y cantante que aquí se presenta en un formato original de batería, guitarra y armonica-voz que conserva una fiereza que no se estilaba en aquellos años.








1976 R. Crumb and his Cheap Suit Serenaders No. 2 (aka Chasin' Rainbows). No soprende que siendo un obsesivo coleccionista de discos y con unos conocimientos privilegiados , llegará a formar su propia banda tocando el banjo. A lo Woody Allen pero sin grandes alardes y mucho menos egocentrismo.







1978 Blind Boy Fuller Truckin' my Blues Away. Famosas son sus ilustraciones para tarjetas, donde recuperó a pioneros del blues y jazz. De hecho estas imágenes son tan famosas como sus propias fotos; durante mucho tiempo esta fue su menera de ganarse la vida. En este caso tenemos una serie de recopilaciones que ilustró con grandes dinosaurios del blues de preguerra.










2000 Trésors Illustrés des Musiques Populaires du XXe siècle. Muchos de estos trabajos los acabó editando en Europa, especialmente en Francia, donde casi se exilia huyendo de la política y moral americana con el que fue tan crítico siempre en sus viñetas y sufrió en sus propias carnes.






2011 Eden & John's East River String Band Be Kind to a Man When He's Down. Es quizás lo más reciente que ha hecho. Pero escuchando este disco se entiende. Vintage total, un dúo joven pero que suena perfecto para ambientar un aserradero de Kentucky o una fábrica clandestina de Bourbon. En los vídeos colabora en viejo dibujante. Y como podéis ver, sus elecciones como ilustrador no tiene nada que ver con lo comercial o vendible.

Son algunas muestras del arte del genial e introvertido Crumb. Para que te acerques a su obra, te recomiendo su divertida “Melodías Animadas”, donde descubres pasajes costumbristas e hilarantes de viejos bluesman, sus trapicheos y vergonzantes viñetas dedicadas a su enfermiza obsesión como coleccionista insaciable de discos, ¿te suena?.